La obsidiana dorada es lava volcánica que se enfría con tanta rapidez que no tiene tiempo de cristalizar. Se distingue de la negra por tener micro partículas de gas que generan esos reflejos tan bellos en la piedra. La obsidiana dorada te ayuda a saber quién realmente eres. Te pone de cara a ti, y te ayuda a integrar todo lo que eres. El mayor don de la obsidiana dorada es aportar luz a la sombra. La obsidiana ayuda a encontrar la integridad permitiendo que descubramos nuestras propias caras ocultas en su verdadera naturaleza y que permitamos que éstas vuelvan a ser parte del propio ser. Tiene un efecto vivificador y hace aflorar imágenes internas ocultas. Amplía la consciencia y ayuda a cambiar patrones de creencias, comunicación y conducta. Mejora la circulación sanguínea. Fue utilizada durante años para reducir próstatas agrandadas.